I. Lavrov, el origen del conocimiento

Día 7: Se calculó que el origen de las ondas provenía de un punto situado a 37° grados desde el meridiano, a exactamente 900 kilómetros del descenso original.

El módulo delta-centurión nos dejó a un par de jornadas del punto de contacto, cualquier esfuerzo para acercarse aún más hubiera sido riesgoso.

Día 9: En aproximadamente 2 horas debiéramos poder acceder al punto exacto del origen de las ondas. Estamos entusiasmados de ser los primeros en acceder a la fuente, aun cuando esto es algo precipitado, creo que en la historia quedará el registro de que este es el primer contacto con vida no proveniente de la tierra. Seremos los descubridores.

Día 12: Bueno, las cosas no resultaron como se esperaban; no sé cómo llegué a este lugar; las ondas provenían de una especie de tótem, una piedra negra y transparente, como esculpida en una aleación de minerales desconocidos. La piedra estaba grabada con incontables símbolos de todas las clases conocidas y desconocidas, pudimos distinguir muy pocos de ellos, y todos repetían el mismo mensaje.

Nos acercamos imprudentemente, las mediciones de radiación eran estables, lo cual nos dio una falsa confianza. Parecía solo un gran repetidor de ondas de una cultura perdida, una especie de testimonio. No tuvimos miedo en tocarla, fui designado para hacerlo, pero al tocar, algo… algo se introdujo en mi mente, y luego… y luego no recuerdo nada. Solo desperté en este lugar.

En un comienzo no tenía nada, literalmente nada, era como si fuera solo mente y manos, no tenía mi equipamiento, ni mis instrumentes, ni siquiera… un cuerpo. Flotando en la nada, en este inmenso vacío, la nada… el infinito.

Día 15 o 16: No estoy segura de cuánto tiempo ha pasado desde el último registro; la grabadora a veces esta en mis manos, y otras veces es como si desapareciera. Cuando recuerdo que sigo un registro, es como si estuviera disponible… pero cuando la olvido desaparece.

Es confuso, estoy en un lugar que no se rige por la física conocida. Mis manos pueden alcanzar cualquier cosa en la que pienso, pero me es difícil pensar, no puedo retener muchas ideas. La verdad tengo un poco de fatiga, quizás al estoy borde de la demencia, pero mi instinto por descubrir me mantiene en esta línea de pensamiento… creo que seguiré mi investigación después, necesito descansar un poco.

Día 20: Creo comprender como funciona este lugar, empiezo a hilar ideas, y estas se materializan en mis manos. Esto es como un sueño, pero es como uno vivido, es como real; es sin duda una extraña dimensión.

He tratado de contactar a mi grupo, pensar en ellos, pero solo logro obtener extrañas fotografías de ellos, de que están haciendo ahora, o como eran en el pasado, o incluso fotografías de ellos en el futuro, incluso en algunas aparezco yo.

Cuando trato de concentrarme sobre este lugar aparece en mis pensamientos esa extraña imagen, es una persona, pero es como si fuera un fotograma, una secuencia de fotogramas en una película antigua, donde el proyector es mi propia conciencia. Quiero contactarle, pero es como si nuestros planos no se interfirieran. Sin embargo, puedo hacer que mis pensamientos le afecten, y que estos a su vez afecten sus pensamientos. No estoy muy seguro de que significa esto…

Día 28: Por fin he descifrado esto, mis pensamientos son materializados en una especie de cartas parecidas al Tarot, son fragmentos de realidad, los cuales se asocian y forman una especie de existencia donde se completa desde el punto en que yo partí. Forman los momentos que ocurrieron después de haber accedido al tótem, puedo descartarlos, reordenarlos y reformar la realidad a mi antojo. Sin embargo, a veces resulta una buena realidad y otras una descabellada, a veces me asusta pensar que lo que estoy armando en verdad está ocurriendo y estoy jugando una especie de partida cósmica con el destino del universo.

Algunas de las realidades que genero me parecen más estables que otras, no estoy seguro si en verdad son más que simples sueños, y si es factible poder adherirse a dichas realidades.

Intentaré lograr una realidad en la que las cosas me sean favorables y luego me imaginaré en ella.

Día 36: Mientras más pensamiento materializo sobre una realidad, más estable se vuelve esta… más plausible. Sin embargo, la otra entidad que está atrapada en este lugar, cada vez que estoy por completar mi realidad, interfiere con sus pensamientos para romper mi realidad.

Creo que estamos en una especie de enfrentamiento, yo por mi parte boicoteo sus realidades, aun cuando me causa algo de curiosidad respecto al mundo del que proviene, siento que no puedo permitir que termine su tarea… algo me gobierna y me obliga a desfragmentar su realidad.

Día 42: He empezado a escuchar una voz.

Esta voz en mi cabeza me dicta que hacer; estoy seguro que una voz le dicta que hacer al otro ente que está atrapado en esta dimensión.

Llevamos tiempo tratando de concretar nuestras realidades, pero constantemente nos boicoteamos mutuamente.

La voz me dice que estoy dentro de una especie de sueño, pero que este no es mi sueño, sino el sueño de aquel ente, que es él quien me está soñando.

La voz me dice que dentro de este sueño me encuentro soñando, que yo estoy soñando al ente que me sueña.

La voz dice que esto es una especie de paradoja, un empate cósmico, dos mentes que alcanzan la iluminación en forma simultánea en sus respectivas líneas temporales, dos mentes irreales… que se sueñan mutuamente.

Si alguno de los dos deja de soñar, si encuentra la forma de romper este empate cósmico, el otro dejará de existir o puede que toda la otra dimensión deje de existir… o puede que no sea así.

Pero ambos somos un sueño, un fragmento de pensamiento en la nada… la única forma de huir de este lugar es proyectarse en una realidad concreta y comenzar a existir en ella. Es la única forma de romper esta ironía al infinito.

La voz me está susurrando que alcance el 17.

Día 45: Los fragmentos de realidad los empiezo a identificar como naipes, cada uno interpreta algo y define algo de la realidad que estoy construyendo. Puedo usarlos para estabilizar mi realidad o para boicotear la realidad del otro ente; cada vez que los uso en mi realidad es como si fuera una parte de la historia que estoy construyendo; los fragmentos explican cómo ocurrieron las cosas después de mi partida. Según entiendo, algunos fragmentos vuelven más estable la historia que construyo, otros su valor es exiguo.

Siento que estos fragmentos de pensamientos en verdad alteran la realidad, y que el tiempo se ha detenido en ambas dimensiones esperando que completemos este descabellado duelo cósmico. Es como tener el poder de escribir la historia universal, pero usando un lenguaje que se debe interpretar, y que no manejamos al completo. Me siendo como dios creando el universo, los ladrillos de mi pensamiento me permiten crear la realidad en la que el resto existe. Que paradójico, en este momento dudo de mi existencia.

Día 50: Cada vez que contemplo mi realidad, veo piezas confusas, por más que se trata de mis propios pensamientos, estos parecieran no obedecerme, están llenos de locura y razón, fortuna y desgracia.

Solo puedo crear realidades amorfas en las que dudo alguien quiera existir.

A veces, pienso que lo más sensato sería dejar que el otro ser complete su realidad y dar por terminado mi universo, dejar que la historia termine. Que la humanidad deje de existir en el momento que conoció a su creador o al menos el mensaje que nos dejó…si es que eso inclusive fue real.

Día 52: Aprendí a manejar y entrelazar mis pensamientos, si bien no puedo controlar lo que pienso, si soy consiente como uso esas ideas, creo que estoy a punto de llegar al 17 de la estabilidad, el temido límite de lo plausible, el número suficiente.

Día 81: Esto es lo que yo pude crear, esta es mi realidad.

Cuando por fin obtuve una realidad plausible, resulto tal como lo dispusieron mis pensamientos, me aferre a la idea de que sería distinto, pero la realidad estable es una sola.

Mi realidad tuvo algo de fortuna, resulta que llegamos al tótem y logramos contactar la fuente de la vida universal, y en algunos cientos de miles de años seremos capaces de conectarnos con los creadores de la humanidad.

Afortunados todos pudimos regresar al módulo junto a la evidencia del tótem primigenio sin ni una baja.

Sin embargo, al parecer tanto conocimiento termino enloqueciéndonos, principalmente a mí, pasamos de orgías de placer y desenfreno a la desgracia de los excesos y el éxtasis de la sangre… no fue una carnicería, solo locura y desgracia.

En el comando central nadie se explica que sucedió, ni como fui el único sobreviviente, como me encontraron en aquel chiquero de partes y de sangre… para ello yo tampoco tengo respuesta.

La razón les dijo que guardaran todo en secreto, que, en base a mis descubrimientos, solo me internaran en un manicomio ultra secreto, una especie de lugar para accidentes científicos, y no mancharan mi nombre para la posterioridad: el descubridor.

Pero todo esto yo ya lo sabía, es lo que pude construir.

La razón me dice que no hable de la dimensión 89.